¿NECESITAMOS CONSUMIR PRODUCTOS LÁCTEOS?

Los productos lácteos son un tema controvertido. Aunque el Programa Nacional de Nutrición y Salud francés (PNNS) los recomienda, su consumo a menudo genera opiniones divididas y hace correr ríos de tinta entre aquellos que están en contra de manera radical, los que los defienden fervientemente y quienes no tienen una opinión clara. Intentaremos ayudarte a resolver esta cuestión y cortar la polémica… (¡sin cuchillos de por medio, lo prometemos 😇!).

LOS BENEFICIOS DE LOS PRODUCTOS LÁCTEOS PARA NUESTRA SALUD

¿Debemos considerar la leche de vaca un auténtico «oro blanco»? No estamos seguros de ello, pero lo que sí podemos afirmar es que es una fuente de nutrientes esenciales para nuestro organismo. Analicemos a continuación su composición más detenidamente.

El calcio, un mineral estrella

¿Realmente debemos consumir productos lácteos? Es indiscutible que los seres humanos necesitamos calcio, y este se encuentra en todos los productos lácteos. De hecho, el calcio es el mineral más abundante en nuestro cuerpo. El 99 % del calcio de nuestro organismo se localiza en el esqueleto y los dientes. La leche, especialmente la consumida a través de productos lácteos, es una fuente formidable de calcio, tanto en cantidad como en calidad. Por ejemplo, 250 ml de leche (el equivalente a una taza) contienen 300 mg de calcio. Esto representa el 37,5 % de la ingesta diaria recomendada para un adulto, que según el PNNS es de 800 mg al día. La misma cantidad de calcio se encuentra en 2 yogures, 80 g de camembert o 300 g de queso fresco.

También se recomienda que los niños pequeños consuman productos lácteos para obtener suficiente calcio, ya que este mineral contribuye a la formación del esqueleto. Según el PNNS, los niños deben consumir de 3 a 4 productos lácteos al día.

Lípidos y vitaminas

Las proteínas lácteas son de gran importancia nutricional, ya que contienen todos los aminoácidos esenciales en proporciones adecuadas. Estos aminoácidos son indispensables para el cuerpo, pero este no puede sintetizarlos por sí mismo. Las proteínas lácteas desempeñan un papel esencial en muchos sistemas del cuerpo, incluidos el sistema nervioso, inmunológico, circulatorio y digestivo. Además, favorecen la absorción del calcio y contribuyen al buen funcionamiento de las células gracias a su acción antibacteriana. No debemos olvidar las vitaminas A, B y D, que afectan positivamente a la vista y a la producción de glóbulos rojos.

¿DEBERÍAMOS CONSUMIR productos lácteos cuando somos adultos?

La recomendación de consumir leche diariamente en la edad adulta es un tema de debate constante en torno a la sempiterna pregunta: «¿Los productos lácteos son saludables?».

Para responder a la pregunta de si debemos o no consumir productos lácteos cuando somos adultos, hemos de tener en cuenta que el principal riesgo asociado con los productos lácteos se relaciona principalmente con la intolerancia o la alergia, y en este caso son los adultos quienes suelen verse afectados. La explicación es sencilla: los niños poseen una enzima llamada lactasa que les permite digerir la leche. Sin embargo, en la edad adulta, esta lactasa desaparece… Adiós a la lactasa y hola a las indigestiones, los gases e incluso las náuseas y los vómitos en algunos casos. Por supuesto, no todos los adultos se ven afectados, y algunos toleran perfectamente la leche, pero es un riesgo que debemos tener en cuenta y que provoca que a veces los productos lácteos no tengan muy buena prensa…

ENTONCES, ¿ES REALMENTE INDISPENSABLE CONSUMIR PRODUCTOS LÁCTEOS?

Sería incorrecto afirmar que la leche es un alimento indispensable para nuestra salud, ya que podemos mantenernos saludables sin necesidad de productos lácteos. Sin embargo, lo que sí es cierto es que la leche, consumida en cantidades moderadas y si se tolera bien, contribuye a preservar nuestra salud por las razones que mencionamos al principio de este artículo.

La buena noticia es que existen otros alimentos con múltiples beneficios que permiten que las vacas también disfruten de su merecido descanso de vez en cuando.

ALTERNATIVAS A LOS PRODUCTOS LÁCTEOS

Si has adoptado una dieta vegana o tienes dificultades para digerir la leche de vaca, puedes prescindir completamente de la leche o, al menos, reducir su consumo, porque existen alternativas muy interesantes a los productos lácteos.

Las bebidas vegetales, por ejemplo, son una de las mejores opciones para reemplazar la leche animal. Estas bebidas, elaboradas a partir de vegetales (por ejemplo, mezclas de cereales, frutos secos y semillas trituradas), pueden sustituir perfectamente a la leche. En comparación con la leche de origen animal, las bebidas vegetales contienen muy pocas grasas saturadas. Estas grasas saturadas están relacionadas con el aumento del colesterol LDL (el colesterol malo) y son parcialmente responsables del desarrollo de enfermedades coronarias. Además, las bebidas vegetales no contienen lactosa ni caseína, que a veces causan intolerancias alimentarias.

Entre las principales bebidas vegetales se encuentra la de soja, que puede suplementarse con calcio para competir con la leche de origen animal en este aspecto. Otras alternativas incluyen bebidas elaboradas exclusivamente a base de vegetales como las almendras, el arroz o la avena. ¡Y aquí viene una buena noticia!: puedes utilizarlas en tus recetas de postres o pasteles igual que si fuera leche de vaca.

En Sojasun, tenemos un lema: comer alimentos ricos y saludables debe ser nuestra prioridad, y por eso las cremas y los postres también tienen su versión vegetal. Estos productos se fabrican a partir de bebidas vegetales a las que se les añaden fermentos lácticos. ¡Déjate sorprender por su cremosidad y sumerge tu cuchara siempre que te apetezca 😊!

Fuentes:

Folleto «Recommandations du PNNS».

https://informationsnutritionnelles.fr/lait-demi-ecreme.

https://www.passeportsante.net/fr/Nutrition/EncyclopedieAliments/Fiche.aspx?doc=lait-amande-bienfaits-lait-vegetal.

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